La oncología pediátrica es una rama de la pediatría que se enfoca en el diagnóstico, tratamiento y atención de los cánceres que afectan a niños y adolescentes. Los oncólogos pediátricos son especialistas médicos altamente capacitados que trabajan para tratar y mejorar la calidad de vida de los pacientes jóvenes que han sido diagnosticados con cáncer.
Los tipos de cáncer que se presentan en niños y adolescentes pueden diferir de los que afectan a los adultos, y el enfoque de tratamiento en la oncología pediátrica se adapta a las necesidades únicas de los pacientes jóvenes. Algunos de los cánceres más comunes en la población pediátrica incluyen:
- Leucemia: Un tipo de cáncer que afecta la médula ósea y produce un exceso de células sanguíneas anormales.
- Tumores cerebrales: Tumores que se desarrollan en el tejido cerebral y pueden variar en tipo y ubicación.
- Linfomas: Cánceres que afectan el sistema linfático, como el linfoma de Hodgkin y el linfoma no Hodgkin.
- Neuroblastoma: Un tipo de cáncer que se origina en las células nerviosas y puede presentarse en diferentes partes del cuerpo.
- Sarcomas: Cánceres que se desarrollan en los huesos, tejidos blandos o en los órganos.
- Retinoblastoma: Un cáncer que se origina en la retina del ojo y afecta principalmente a niños pequeños.
- Tumores de Wilms: Cánceres que se desarrollan en los riñones, comúnmente en niños pequeños.
- Rabdomiosarcoma: Un tipo de cáncer que afecta el tejido muscular y puede ocurrir en diferentes áreas del cuerpo.
La oncología pediátrica no solo se enfoca en el tratamiento médico, sino también en el apoyo emocional y psicológico tanto para los pacientes como para sus familias. Los equipos multidisciplinarios trabajan juntos para brindar el mejor cuidado posible a los niños que enfrentan el diagnóstico y tratamiento del cáncer.